domingo, 27 de mayo de 2012

YO YA NO QUIERO...

Yo ya no quiero resolver los problemas de los demás, mientras los míos se quedan en la dulce espera de los invitados que nunca llegarán...

Yo ya  no quiero enfrentarme a la rutina del ir y venir, por un salario que solo me da para comer y sobrevivir en una ciudad llena de furia e irracionalidad...

Yo ya no quiero vestirme bien para guardar apariencias de un mundo irreal que solo existe en revistas de banalidades y en programas de TV...

Yo ya no quiero escuchar las promesas de malditos políticos que solo ven por su propio interés y arrastran la ignorancia y los sueños de la gente como si fuera su patrimonio personal...

Yo ya no quiero falsas amistades, que solo aparecen los días de cumpleaños y fiestas para regalar deseos que ni ellos mismos se creen...

Yo ya no quiero dormir temprano para alargar el inútil descanso de la rutina y de la mezquindad de los miles de problemas que no podremos solucionar...

Yo ya no quiero sacar cuentas para ver si llego a fin de mes, solo para comprobar que las cuentas comienzan de nuevo al mes siguiente...

Yo ya no quiero estar en una desolada sala de espera en cualquier aeropuerto para agarrar el último vuelo de la oscura noche...

Yo ya no quiero instalarme en una burbuja de cristal mientras el resto del mundo se cae a pedazos por las migajas de un mundo carente de sentimientos y de sinceridad...

Yo ya no quiero ser el de ayer, ni el de mañana...solo soy el de hoy, el único que existe...

Yo ya no quiero ser la esperanza de nadie ni el dueño de la verdad más absoluta, que por absoluta es la menos real que existe...

Yo ya no quiero ser la tristeza de nadie, porque nadie puede convertirse en mi tristeza y deberme algo por ella...

Yo ya no quiero seguir encerrado en las murallas de una absurda soledad, construidas para alejar todo lo bueno que la vida pueda dar...

Yo ya no quiero verte en cada botella de vino abierta al azar, ni en cualquier barra anónima de esta irreal ciudad...

Yo ya no quiero extrañarte ni desear que te vaya mal, ni verte reflejada en los miles de rostros que me encaran en cualquier lugar...

Yo ya no quiero vivir alejado de tu suave sonido al andar, donde con cada movimiento tuyo se perdió toda mi fe en salir invicto de ese extraño juego que es el amor y el olvido...

Yo ya no quiero ser tu enemigo ni tu rival, la vida es realmente corta para perderla en un irracional juego de estrategias y de inseguridad...

Yo ya no quiero gritar ningún otro gol sin tí, ni rozar mi mano con cualquier otra mano que no tenga tu nervioso sudor en una noche ajena y especial...

Yo ya no quiero escribir palabras que tú nunca llegarás a pronunciar...

Yo ya no quiero...

Yo ya no quiero sin tí...